La importancia de medirse la presión
De entre todas las cosas que hoy en día podemos hacer por nuestra cuenta, sin necesidad de acudir a profesionales, medirse la tensión es sin duda alguna una de las más increíbles. Aunque ahora nos parece normal, para las personas hipertensas, era un auténtico problema tener que ir diariamente a medirse la presión a un hospital o centro de salud.
Gracias a los avances tecnológicos, hoy podemos tener un sistema para medirnos la tensión fiable en casa.
Si usted está cansado de ir a la clínica o farmacia periódicamente para controlar la presión, los esfigmomanómetros pueden ayudarle mucho, porque son productos relativamente baratos y le permite controlar su presión en casa.
Si tiene dolores de cabeza frecuentes, zumbidos en los oídos, trastornos visuales, enrojecimiento facial, palpitaciones o mareos pueden ser síntomas de presión irregular.
¿Qué es la presión arterial?
La presión arterial no es otra cosa que la «fuerza» o presión ejercida por el sangre en nuestras arterias durante su circulación.
En el momento que nuestro ventricolo izquierdo (parte de nuestro corazón) se contrae durante el proceso de bombeo de sangre, tenemos la sistole, cuando se relaja después de la contracción tenemos la diastole. Por este motivo, la medición de la presión se hace en dos niveles, lo que llamamos la presión alta o baja, es decir, Sistole o Diastole. La medición se hacen en milímetros de mercurio, mmHg.
En la pantalla de nuestro medidor o en el manómetro, si el tensiometro es digital o manual, el primer número indica la presión máxima (sistólica), es decir cuando el corazón se contrae, el segundo número indica la presión mínima (diastólica) y se observa cuando el corazón y en fase de relajación.
La presión puede aumentar con la edad o el estress. En el caso de la edad, con el avance de los años las arterias se vuelven más rígidas y esto hace que el fluído a veces sea un poco más complejo y también que suframos variaciones durante el día, por ejemplo no tenemos la misma presión por la mañana que por la tarde/noche. La presión suele bajar según pasen las horas y a subir al llegar la noche.
Es en el momento del sueño, donde normalmente tenemos los valores más bajos.
Entonces, ¿Porqué debemos medirnos la presión?
Está científicamente comprobado que una presión baja obtenida de forma natural, es un síntoma de la longevidad. En cambio una presión alta determina un estado dicho hipertensión arterial. Éste es uno de los principales factores de riesgo que traen enfermedades cardiovasculares, además puede provocar daños al riñón y ojos.
Por eso te recomendamos que vayas al médico para ver cómo tienes la presión, y si es necesario comprar un tensiometro para hacer siempre controles preventivos de tu presión arterial. De hecho, puedes ser uno de los millones de hipertensos que aún no lo saben!, ya que no es una enfermedad con síntomas evidentes, al menos, al principio. Su prevención es fundamental para tener una vida sana y tranquila.
Aunque no pretendemos asustaros, algunas personas llaman a esta enfermedad el asesino silencioso. Muchas veces se llega a conocimiento de esta situación sólo después de un control ocasional, hecho otro motivo. Acuérdate de que no es nunca demasiado tarde para mejorar tus condiciones de vida, comienza ahora controlando periódicamente tu presión arterial. Pensamos que este consejo no está de más, sobre todo si tienes mas de 45 años.